Hoy, después de un finde algo turbulento, un día bastante extraño.
Hemos tenido el primer seminario, del que hemos salido agotadas. Mi compañera y yo hemos salido voluntarias para hacer la primera competencia... telita. No sé si alegrarme o arrepentirme ahora...
En resumen, la tarde ha ido más o menos como siempre.
Por una excepción. A las nueve de la tarde (manda huevos, teniendo en cuenta que llevaba ahí desde las seis) nos han dicho que, como estuvimos en contacto (especialmente yo) con un paciente con meningitis, antes de que se le administrara el tratamiento, nosotras también tendríamos que tomarnos cierto tratamiento. Menos mal, ¿eh? Que eran las nueve... que si no llego a comentarles, de casualidad, que no pude pincharle, nos vamos a casa y ahí tan tranquilos...
Me cabrea. Mucho. Pero bueno, espero que por tomarnos la pastilla, ya no nos pase nada... Claro, después de dos días sin saber nada de nada.
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